Il ritorno d’Ulisse in patria, de Claudio Monteverdi
Teatro Real de Madrid, 25 de Abril de 2009
Les Arts Florissants.
William Christie, Pier Luigi Pizzi.
Segunda ópera de la trilogía monteverdiana que nos ofrece el Teatro Real.
Muy bien interpretada, correcta e insípida puesta en escena y perfectamente servida por la orquesta de Les Arts Florissants de Christie. ¿Muermo? Pues sí, un poco, pero es Monteverdi, qué te esperas. Es lo que hay. Es una música así, entre comillas, "bonita", muy agradable de escuchar, pero es imposible que se te quede una melodía en la cabeza. Afortunadamente va alternando partes lentas con más movidas cada muy poco tiempo y se me hizo mucho más entretenida que el Orfeo del año pasado.
En el terreno vocal, estupenda Christine Ricci con una voz que tiene el patetismo y resignación que el papel de Penélope requiere y muy bien todos en general.Por poner un ligero pero, se lo pongo a la Juno, un poco destempladilla, pero vamos, todos muy bien.
A Kobie van Rensburg se le achaca por ahí que grita demasiado para este tipo de música pero hijo, da gloria que le dé un poco de chicha al personaje. Porque vamos, la progresión dramática de la línea argumental del bodriete mitológico es de una lentitud pasmosa.
Me decía mi amigo Almatosa al salir: la parte de los dioses se la podrían haber ahorrado.
¡No! Incauto infelice. Primero, porque nos hubiéramos quedado sólo con el rollo de las dudas de Penélope y segundo, porque nos hubiéramos perdido a Ed Lyon, que hizo el doblete estupendo de Júpiter y Eurímaco y que tenía una planta más que destacable, especialmente con los modelitos que el Pizzi le hizo ponerse (y de los que la web del Real, para variar, no tiene foto). Muy bien, muy bien, nos ha gustado este chico, comentábamos como viejos verdes en el descanso. No tenemos remedio. En fin.
Yo salí muy danzarín y prebarroco de este Ulises. Aunque también hay que decir que ha sido mi alternativa de ocio más "movida" del pasado fin de semana, lo que dice mucho de mi estado de amuermamiento general de los últimos días. Tendría que haberme ido a Valencia a ver la Turandot pero al final no salió.
Lo próximo, la Condenación de Fausto.