Pues me parece a mí que muy poco voy a ir a Barcelona el año que viene.
No es que la temporada no sea interesante (que tampoco es como para tirar cohetes), sino que si me planteo cuáles de las óperas me merecen un viaje me quedo con un triste recuento: UNA.
¿Y eso?
Veamos lo que entra en mi turno de abono:
1. Ballet de Sao Paulo: Ni de coña.
2. Tiefland. Voy. Me gusta la ópera, es bastante infrecuente y tanto reparto como producción prometen.
3. Le nozze di Figaro. No. Qué pesadez. ¿Otra vez? Además, ya la ponen en el Real.
4. Simon Boccanegra. Me aburre. Paso.
5. L'incoronazione di Poppea. Aquí podría darme el punto e ir, pero lo veo difícil, es mucho gasto y ya la voy a ver al año siguiente en Madrid. Sin Kasarova, ya sé.
6. Nederlans Dans Theatre I. Qué manía de meternos ballet en los abonos, joder.
7. La cabeza del Bautista. Huy, un experiment.
8. Fidelio. Tiene el aliciente de la Mattila (qué curioso, hace unos años cuando se hablaba de esta mujer era para ponerla a caer de un burro y ahora es diva entre las divas). No sé.
9. Salomé. A ésta quizás vaya.
No me entran Los Maestros Cantores.
En fin, que estoy muy desanimado con la temporada barcelonina. Que sólo haya una ópera a la que tenga muchas ganas de ir me decepciona un poco.
Hala, a empezar a colocar entradas. Qué vida más dura.
Qué HORROR de temporada, qué rollu!
ResponderEliminarPoz zi quierez alguna entrada, melodizez
ResponderEliminarPrefiero las temporadas rollu que después se saldan con satisfacciones mil, que temporadas (como esta) que sobre el papel tenían que ser la repanocha y luego....Con tal de no tener Aidas, Bohemes y Traviatas a las cuales siempre terminamos comparando con las versiones referenciales de toda la vida.
ResponderEliminarEl Fidelio hace años que no se hace, la producción es la del MET y los cantantes son más que prometedores. (Acertadísimo lo de la Mattila). La Salomé, al menos vocalmente está garantizada, el Simon es una obra que mencanta y el reparto es consistente. El Tiefland, Meistersinger, L'Incoronazione, Le Nozze, si ciertamente no es una temporada ágil, es como una mantecada de la Estepeña en pleno mes de agosto y en Benidorm, pero esperemos.
Yo de ti, me reservaría algún fin de semana más.